Roban la escultura del Festival Internacional de Cine Infantil de Valencia de Mar Revert y el artista fallero Manolo Magraner
Esta escultura que representa el icono y logotipo del Certamen internacional de cine infantil en Valencia, fue sustraída ante la mirada impotente de la organización del Festival.
A plena luz del día, sobre las 11 de la mañana, una banda de ladrones disfrazados de payaso tardó menos de dos minutos en robar la escultura mientras la cargaban en la furgoneta para trasladarla. La osadía de los ladrones fue tal que aún les dio tiempo para dejar una nota en la que se leía ‘gracias’.
En el cine se cumple aquello de que lo contrario de toda verdad es también cierto. Una de las hipótesis que se manejan en este robo es que la organización del certamen está preparando un sketch humorístico como sorpresa para la gala de presentación del próximo 29 de octubre en el teatro del Ateneo Mercantil de Valencia. Pero, de momento no se sabe nada del paradero de la obra que mantiene en vilo a toda la organización del certamen. El monumento fallero del Festival, ha logrado estar expuesto en las instalaciones de la Estación del Norte, tras importantes esfuerzos por parte de la organización.
Las declaraciones a la prensa del Director del Festival, Marcos Campos, fueron que el 90% del arte robado en el mundo nunca vuelve a los museos o las colecciones privadas. “El robo de esta escultura no es ni el primero ni uno de los más osados de la historia y el FBI seguro que no la tiene en el primer lugar de su lista de robos de arte. Estoy convencido que en la próxima rueda de prensa que ofreceremos este viernes se desvelará este misterioso robo”.
Asimismo, Marcos Campos comentó que “las películas de robos de obras de arte han sido una constante a lo largo de la historia del cine y en este certamen el arte y los ladrones payasos forman parte de una trama de la que el protagonista principal es la escultura robada, icono del Festival, que como propósito fundamental trata de difundir el amor al séptimo arte y como cultura social para crear –criterio- en un público formado por padres, profesores y sobre todo, niños. De tal modo, continúa Campos, “que la alienación en el ámbito enseñanza-aprendizaje actual, debería ser revisada para no significar una dependencia a ciertas condiciones educativas. Hay que levantar voces en contra de esta impotencia, subordinación,
despersonalización y sujeción
del individuo a través del miedo desde la educación. Y el cine es una herramienta amable, si se puede educar desde la importancia de fomentar el criterio.
Por tanto, el Festival de Cine, pretende aportar su granito de arena en el ámbito educativo a través del séptimo arte y por ello nos implica asumir una posición crítica positiva cuyo objetivo es difundir la importancia de la observación del cine con –criterio-, transformando al espectador en miembro activo del contexto social y cultural, inmerso en la vorágine y a merced de las voraces políticas de mercado que hoy rigen el mundo.
Una mirada contextualizada a través del cine, destinada en gran parte y directamente a la necesidad de información con base a principios de justicia, equidad inclusión y participación ciudadana. Enriquecimiento intelectual, moral y material de la sociedad.
El robo de la escultura, no se denunciará ante la autoridad correspondiente según informan los organizadores de este evento, pues en todo caso, se reproducirá la escultura para ser expuesta en su lugar de origen, que representa el transporte público y cinematográfico del tren a través de una exposición comisariada por el escritor Luis Gasca y que se podrá ver en el vestíbulo de la estación del Norte de Valencia.
Desde la dirección del Festival se les anuncia a los payasos, que desde este momento es un regalo como símbolo del mensaje del Festival, -la adaptación a los cambios que la sociedad exige, tanto en la relación a las enseñanzas como a la propia investigación personal con discernimiento o razonamiento en todo el arte.
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