Bombas Gens inaugura una exposición de obras japonesas que transformaron radicalmente el lenguaje fotográfico
Bombas Gens Centre d’Art ha presentado a los medios de comunicación La mirada de las cosas. Fotografía japonesa en torno a Provoke. Se trata de una selección de piezas de la Colección Per Amor a l’Art de los integrantes de la agencia VIVO -Ikkō Narahara, Shōmei Tōmatsu, Eikoh Hosoe, Akira Satō y Kikuji Kawada-, activa entre 1959 y 1961, así como del colectivo Provoke (1968-1970): Yutaka Takanashi, Takuma Nakahira y Daidō Moriyama. También se muestra el trabajo de Hiroshi Hamaya, Takashi Hamaguchi, Toyoko Tokiwa, Nobuyoshi Araki, Tamiko Nishimura, Ishiuchi Miyako, Kōji Enokura y Michio Harada. Todos ellos, fotógrafos y fotógrafas japoneses que entre 1957 y 1972 fueron artífices de una transformación radical en el lenguaje fotográfico.
“Para nosotros esta exposición es muy especial porque en ella se muestra uno de los núcleos más potentes de la Colección Per Amor a l’Art. De hecho, podría afirmarse que la selección que se exhibe constituye la colección más importante de fotografía japonesa de esta época, en manos privadas, fuera de Japón. Estábamos deseando poder compartirla con el gran público desde hace mucho tiempo y por fin ha llegado el día”, ha manifestado Susana Lloret, vicepresidenta de la Fundació Per Amor a l’Art.
La propuesta de Bombas Gens pone el foco en la renovación fotográfica que se produjo en el país nipón durante la posguerra, en paralelo a los grandes cambios económicos y culturales de este período, marcado por enfrentamientos sociales, principalmente contra la herencia americana de la ocupación. Una ruptura propiciada por la revista Provoke, de la que tan sólo se publicaron tres números (entre 1968 y 1970), y que entendía la fotografía como un lenguaje alternativo. El grupo de fotógrafos que la fundaron, a su vez, bebía de la influencia de otra formación: VIVO. Una agencia inspirada en la americana Magnum Photos con el objetivo común de forjar una fotografía crítica y subjetiva, en oposición a las convenciones establecidas.
“Al principio teníamos piezas de sólo dos fotógrafos, Tōmatsu y Moriyama, y a partir de ellos empezamos a tirar del hilo y a completar el conjunto al que hemos llegado. Contrariamente a lo que pueda parecer en un primer momento, el vínculo de los fotógrafos que exponemos no es nacional, sino personal. Todos ellos tenían una relación en vida, no nos hemos inventado ningún nexo de unión porque ya existía. Tan sólo hemos recopilado sus obras”, ha afirmado Vicent Todolí, director del Área de Arte de la Fundació Per Amor a l’Art y co-comisario.
A su vez, la co-comisaria y directora de Bombas Gens Centre d’Art, Nuria Enguita, ha explicado que “se ha hecho un trabajo de recopilación al que también se ha sumado una labor investigadora, fruto de la cual presentamos hoy las obras de cuatro generaciones de fotógrafos. A través de ellas, se puede observar perfectamente una evolución, y las influencias que supusieron los unos para los otros. Además, sacamos a la luz tres nombres femeninos: Toyoko Tokiwa -dedicada sobre todo al retrato de las mujeres trabajadoras-, Tamiko Nishimura -que comenzó como ayudante de Moriyama- o Ischiuchi Miyako, que comienza su trabajo en 1975 en la estela de Provoke.”
También se presenta la obra de Michio Harada, un profesor de química y fotógrafo amateur coetáneo al resto de autores de la muestra y descubierto por el artista João Penalva.
Se podrá visitar gratuitamente hasta el 2 de febrero de 2020.