El Institut Valencià de Cultura presenta en el Rialto su producción 'Els quatre genets de l'Apocalipsi'
El Institut Valencià de Cultura presenta, del 22 de febrero al 4 de marzo, la adaptación teatral d''Els quatre genets de l'Apocalipsi', una de las obras más conocidas del novelista Vicente Blasco Ibáñez. En una versión teatral de Juli Disla y dirigida por Inma Sancho, está interpretada por Empar Canet, Vanessa Cano, Enric Juezas, Borja López Collado, María Maroto, Carles Sanjaime, Bruno Tamarit y Guille Zavala. La escenografía es de Carlos Montesinos, la iluminación de Víctor Antón y el vestuario de Pasqual Peris.
El espectáculo, que ha sido producido por el Institut Valencià de Cultura, fue estrenado el mayo pasado y ahora se repone en el Rialto antes de hacer una gira por el Circuito Cultural Valenciano, que lo llevará a las ciudades de Ontinyent, Gandía, Dénia, Paterna, Llíria, Algemesí, Sagunto, Nules y al Teatro Principal de Castellón.
El director adjunto de Artes Escénicas de el IVC, Roberto García, ha recordado que si el año pasado era el 150 aniversario del nacimiento de Blasco Ibáñez, este 2018 es el centenario del final de la Primera Guerra Mundial, tema sobre el que se articula toda la historia d''Els quatre genets de l'Apocalipsi'.
La novela fue concluida en 1916, cuando el escritor vivía en París. Consciente del momento histórico, Blasco Ibáñez se alinea como un entusiasta partidario de los aliados, que son postulados como el bando que merece la victoria. El escritor apasionado acaba convirtiéndose en activista francófilo. Por eso escribe una historia de amor y de conflicto familiar en un contexto destructivo y trágico: la Primera Guerra Mundial.
La directora, Inma Sancho, ha manifestado su satisfacción por esta reposición, ha recordado que el montaje se hizo en tan solos seis semanas y que los textos se construyeron al mismo tiempo que la representación, y ahora, tanto ella como los actores, se han podido enfrentar a la obra con un poco más de calma, una escena ha sido modificada y en sus palabras "la parte final tiene más ritmo, lo que ayuda a comprender mejor la historia".
La novela de Blasco Ibáñez retrata una sociedad en un momento de cambio, de trasiego. Y será la guerra cruel la que lleve a los personajes a hacer aparecer los instintos, los comportamientos y los valores que solo se entienden si los leemos con emoción y humor.
Es una historia que está de actualidad a causa del crecimiento de los extremismos, de los populismos y la polarización de la sociedad en el ámbito político, un escenario semejante al retratado por Blasco Ibáñez.
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