Mauricio Domínguez-Adame: "Las acciones del Plan Cañaveral tienen como fin aumentar la cantidad y calidad de las aguas que pasan por este barranco y llegan a L'Albufera"

¿Cómo nace el Proyecto Cañaveral? ¿Y por qué lo lleva a cabo una empresa como Heineken?

Se enmarca dentro del plan internacional Water Balancing, con el que la compañía pretende alcanzar el balance hídrico neutro en las cuencas de los ríos que nutren de agua a sus fábricas.

El cuidado de las fuentes de agua es una de las seis áreas de actuación prioritarias de la estrategia de sostenibilidad de HEINEKEN España, ‘Brindando un Mundo Mejor’. Gracias a las inversiones y a las optimizaciones de procesos implantadas en todas sus fábricas la Compañía ha logrado reducir un 28,5% su consumo de agua en los últimos seis años, consiguiendo bajar hasta los 3,5 hl/hl de agua por cada litro de cerveza elaborado en 2016, acercándose al objetivo de que se ha marcado para 2020 (3,3 hl/hl). El ahorro alcanzado en 2016 de 325 millones de litros de agua –cantidad equivalente a la necesaria para llenar 130 piscinas olímpicas- en 2016.

El proyecto se centra en el entorno del Barranco del Poyo, ¿por qué en esta localización?

El Proyecto Cañaveral se desarrolla en torno a uno de los principales afluentes de la Albufera de Valencia, un espacio con alto riesgo de inundación que se ve especialmente afectado en épocas de gota fría. Las actuaciones tienen como objetivo la restauración ecológica y la rehabilitación hídrica del Barranco del Poyo a su paso por el término municipal de Quart de Poblet (Valencia), zona con la que la compañía ha desarrollado un vínculo especial desde que en los años setenta se instalase una de sus fábricas, generando unos 300 puestos de trabajo directos y más de 12.500 indirectos. En este sentido, debe tenerse en cuenta que el barranco del Poyo es un recurso natural de importancia estratégica para la Albufera, para los habitantes de Quart de Poblet así como por los potenciales visitantes de esta área. Creemos que es un activo que es necesario cuidar, poner en valor y promover.

¿Qué 20 especies autóctonas se están plantando? ¿cuál es la siguiente fase del proyecto?

Tras medio año de intenso trabajo, HEINEKEN España, mediante convenio con la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural de la Generalitat Valenciana, ha iniciado las actuaciones de plantaciones de 4.276 ejemplares de 20 especies autóctonas de ribera.

De la Salix purpurea, Salix eleagnos, Salix atrocinerea y la Salix alba, van a plantarse un total de 2000 ejemplares. En menor cantidad, habrá 160 de Fraxinus angustifolia, 105 de Celtis australis, 15 de Ulmus minor, 160 de Pistacea lenticus, 90 de Phyllirea angustifolia, 90 de Rhamnus alaternus, 77 de Crataegus monogyna, 155 de Myrtus communis, 400 de Nerium oleander, 360 de Iris pseudacorus, 160 de Lythrum salicaria, 78 de Cladium mariscus, 216  de Dorycnium rectum, 78 Sparganium erectum, 60 de Scirpus tabernaemontani y 72 ejemplares de Scirpus holoschenus.

La siguiente fase de trabajos, una vez estabilizados los márgenes del barranco del Poyo, será fomentar su uso público. Van a implementarse actuaciones que lo revaloricen y favorezcan su visita, procediendo a su señalización y a la instalación de paneles interpretativos, además de conectarlo con áreas de uso público ya existentes. El cauce pasará de estar oculto por los cañaverales a ser visibles de nuevo, lo que supondrá una notable mejora paisajística. Creemos se potenciarán las posibilidades de uso de este ecosistema, así como su capacidad de atraer turismo respetuoso con el medioambiente

Proyectos como estos ayudan a revitalizar y cuidar un entorno tan importante para los valencianos como es l´Albufera, ¿verdad?

Proteger las fuentes de agua, en una región tan especial para HEINEKEN España como es la Comunidad Valenciana, forma parte de nuestro compromiso. El objetivo es restaurar ecológicamente y reequilibrar hídricamente este espacio, uno de los principales afluentes de L’Albufera de Valencia, considerada parque natural desde 1986 y tan ligado a la historia de esta tierra.  Apostamos por mejorar su funcionalidad ecológica, crear el ambiente y las condiciones propicias para favorecer su biodiversidad y su uso público.  

Las acciones del Plan Cañaveral tienen como fin aumentar la cantidad y calidad de las aguas que pasan por este barranco y llegan a L’Albufera, compensando al medio con 348 millones de litros de agua, el equivalente a 1,5 veces la producción de cerveza de la fábrica de HEINEKEN España situada en Quart de Poblet.

¿Cómo colabora el Ayuntamiento de Quart de Poblet, dónde se encuentran las instalaciones de Heineken en Valencia, en este proyecto?

Estamos muy agradecidos al Ayuntamiento de Quart de Poblet por mostrar siempre su apoyo y por embarcarse con nosotros en un proyecto que está estrechamente ligado a nuestros valores como compañía que apuesta decididamente por la sostenibilidad. Además, para nosotros es un placer trabajar para mejorar el medioambiente en una región con la que mantenemos una estrecha vinculación.

Como muestra del apoyo del consistorio podemos destacar que ha conseguido que se incluya en las plantaciones 15 ejemplares Ulmus minor, facilitados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a través de su Subdirección General de Política Forestal, dentro del programa de conservación de olmos. Se trata de una variaedad de estos árboles resistentes a la grafiosis (enfermedad que ha provocado la muerte de gran parte de las olmedas silvestres) y vienen del vivero ubicado en Alacuás (Valencia).

Esta aportación permite dotar de un mayor valor ambiental, de gran importancia histórica y de biodiversidad adicional a esta actuación modélica en el Barranco del Poyo.

Una vez plantadas, habrá que conservarlas y cuidarlas…

El Proyecto Cañaveral quiere devolver el equilibrio hídrico a la zona y restablecer una flora más propia del lugar, que recupere especies autóctonas. Es el primer paso porque, con ellas, se facilita que se pueda recuperar de manera natural fauna que había abandonado esta área por la invasión de la caña.

Nuestra actuación es el inicio, pueden parecer pequeños pasos, pero es una ayuda muy valiosa para que se ponga de nuevo en marcha el ecosistema natural de la zona.

Las especies invasoras y la contaminación dañan cada año esta zona, ¿hacen falta más iniciativas como estas?

La caña está considerada uno de los 100 organismos más invasores del mundo por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). En el caso del Barranco del Poyo, la invasión estaba afectando muy seriamente al entorno, generando un desgaste hídrico, la pérdida de suelo y aumentando el riesgo de inundaciones en cuanto se producía una súbita subida fluvial, algo muy común en València con las temidas gotas frías.

Visto el problema, se había intentado dar solución con acciones como la impermeabilización, poniendo hormigón, pero se perjudicó el paisaje agrario y fluvial de la zona, y se vio afectada la calidad de vida. HEINEKEN  España, la Consellería y el Ayuntamiento de Quart han logrado poner en pie este nuevo proyecto, que propone un acercamiento a esta situación desde la restauración del ecosistema. Creemos que va a ser muy beneficioso, tanto para el reequilibrar hídricamente el espacio como para mejorar el paisaje, la agricultura y, en definitiva, la vida en los alrededores de este paraje.

Las acciones que se han ejecutado están orientadas principalmente a la eliminación de cañas en más de 1,52 km y restauración fluvial de 2,7 km de ribera que abarcan una superficie de actuación de 5 hectáreas, con especies tan singulares como el lirio amarillo (Iris pseudacorus), que permite con sus raíces la estabilidad de los taludes, frente a especies como el cangrejo rojo americano, impidiéndole realizar galerías. Los trabajos propuestos contribuirán a incrementar la diversidad de hábitats, de especies de flora y la complejidad estructural de las riberas, con lo que su capacidad de acogida de fauna aumentará.

Pensamos que es la mejor manera de abordar estos temas, ayudando a recuperar el equilibrio natural y propio de la zona. Creemos que este tipo de acercamientos es necesario y sostenible, con resultados que se mantienen en el tiempo. Y, desde HEINEKEN España, estamos abiertos a seguir colaborando con las instituciones para contribuir a la creación y desarrollo de este tipo de acciones medioambientales.